La economía mundial ha logrado una tasa de reducción de emisiones de carbono un 2,6% en 2016, lo cual supone una notable mejora respecto al 1% anual que se registraba hasta 2014. Sin embargo, esta reducción está todavía muy lejos de la tasa anual de descarbonización del 6,3% necesaria para poder cumplir el Acuerdo de París.